Los talleres ocupacionales para discapacitados intelectuales, son de vital importancia para este colectivo. Sus beneficios son muy importantes, tanto como para ellos, como para la sociedad en la que estamos inmersos.
Más del 60% de este colectivo en condiciones para trabajar se encuentran en paro y hay que destacar que en estos talleres se realizan actividades de inserción laboral.
Favorecen la superación de obstáculos que son producidas por su discapacidad, mejorando sus necesidades de adaptación, permitiéndoles más autonomía personal, lo que hace favorecer su integración en el entorno social, al sentirse útiles.
Durante más de 20 años este gran servicio ha sido gratuito en Valladolid, y ahora leemos en la prensa que el Ayuntamiento está considerando cobrar una aportación a las familias que cobren más de 530 euros mensuales. Indignante.
La Administración da la espalda a este colectivo y a sus familias, en vez de dar más apoyo. Toda la ayuda a este colectivo es poca. Necesitan más recursos asistenciales como: centros de atención temprana, centros de educación especial y pisos tutelados.
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